¿Cuánto costaría revalorizar las pensiones con la inflación hasta 2022? Según el simulador de la Autoridad Fiscal, se necesitaría inyectar en el sistema unos 25.000 millones de forma permanente, siempre que se mantengan unas proyecciones razonables de PIB e inflación.
Es decir, ese es el dinero que haría falta al año para que las prestaciones no perdiesen poder adquisitivo, dado el déficit que existe de 18.000 millones y que con ese agujero la ley no deja subirlas más allá del mínimo legal del 0,25%. Desde que entró en vigor en 2014, este será el primer año en que los jubilados claramente pierdan capacidad de compra.
Incluso con la recuperación del empleo y los ingresos de la Seguridad Social creciendo, el desfase entre ingresos y gastos del sistema de pensiones ha seguido engordando. Hasta este año, cuando las previsiones de los expertos apuntan que podría dejar de ampliarse el déficit o, incluso, reducirse un poco hasta el entorno de los 16.000 millones.
Aun así, un informe de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal cifraba las necesidades estructurales del sistema en unos 10.000 millones. Es decir, ni siquiera recuperando el empleo perdido se lograría equilibrar las cuentas a menos que se hagan reformas.
En este contexto, la Autoridad Fiscal ha publicado un simulador que estima el Índice de Revalorización de las Pensiones o IRP, la fórmula por la cual se calcula la subida anual de las prestaciones y que está diseñada para asegurar la sostenibilidad de las cuentas.
Esta aplicación permite introducir diversos supuestos, modificando variables como el crecimiento nominal, el número de pensiones o las transferencias del Estado a la Seguridad Social. Con todo ello se puede conocer bajo distintas hipótesis cuánto puede subir la pensión hasta 2022.
Y también se puede hallar cuánto dinero haría falta inyectar al sistema para poder subir las pensiones en función de la inflación al tiempo que se preserva el equilibrio financiero.
Respecto a 2017, el cálculo sale que se precisan 17.000 millones a fin de poder actualizarlas conforme al IPC. Esos 17.000 millones tendrían que incorporarse de forma permanente, es decir, todos los años. Y para 2018, la cifra escala hasta los 25.000 millones estructurales si se quiere actualizar las pensiones al 1,7% de inflación que prevé el Gobierno.
Fuente: Elpais.com